Es evidente para todos
los que se dedican a la comunicación corporativa, que cualquier
sector, cualquier empresa es un mundo que requiere de una comunicación
personalizada, adaptada a su ámbito de actuación, a sus intereses y a sus
necesidades si se quieren conseguir los objetivos propuestos.
Pero hay además una
actividad dentro del mundo empresarial que requiere de una comunicación
específica concreta, propia. Nos referimos a la innovación, a la labor que
realiza una compañía, para crear algo nuevo o mejorar lo ya existente.
Aquí los retos a los
que se enfrentan los profesionales de la comunicación pasan en primer lugar y de
manera especial por entender y atender al mensaje, muchas veces altamente
tecnificado y conseguir traducirlo a un lenguaje que pueda a su vez comprender
el ciudadano de a pie de un modo atractivo, rápido y sencillo, para por un lado
situar en el escenario mediático y público al cliente y, por otro, ser capaces
de trasladar a los ciudadanos la importancia del trabajo que desarrolla en el campo
de la innovación, así como el beneficio que aporta tal actividad a la sociedad.
Para ello en primer
lugar, es preciso que haya una interlocución abierta, constante y fluida entre
el cliente y la agencia, además de conocer lo más posible la materia y la actividad
a comunicar. Igualmente hay que tener presentes conceptos clave para posicionar
a la compañía, tener claro que la comunicación que se va a transmitir debe ser
una simbiosis entre la información facilitada por el cliente, las ideas
aportadas por los expertos, por los científicos y por los periodistas
especializados en el tema de que se trate.
Igualmente hay que hacer
una apuesta decidida por conciliar, lo que muchas veces es un verdadero
desafío, conocimiento y ciencia con entretenimiento e información amena,
especialmente a la hora de trabajar en las redes sociales y la comunicación
online que es instantánea y global, lo que nos obliga a dominar las
herramientas digitales diseñando una estrategia específica, yendo más allá de
colgar un tuit, un comentario en Facebook o en cualquier otra red que no
responda a ningún objetivo concreto establecido de antemano.
Por último y no menos
importante, hay que concienciar al cliente de la importancia de ser creativos a
la hora de comunicar y de la experiencia en esta área de los expertos en
comunicación, ya que desde las agencias se puede aportar mucho por estar
especializados en la transmisión de mensajes y por tanto ser expertos en crear
sinergias y dar un valor añadido a los departamentos creativos de las empresas en
la elaboración de mensajes, construcción de imagen de marca, diseño de
materiales impactantes y la organización y celebración de actos que posicionen
al cliente como líder y referente a hora de comunicar innovación.
Así, las agencias pueden
cumplir de manera adecuada con la labor encomendada por los clientes para comunicar
a la sociedad de manera eficaz su actividad en innovación y, por tanto,
conseguir que cada vez más los ciudadanos se interesen por la innovación y lo
que esta aporta a la mejora de su calidad de vida.